La jubilación, el cambio de vida que esperabas
Por un lado, el físico. En relación con este punto, las administraciones ofrecen descuentos de un porcentaje muy alto para incentivar la realización del ejercicio físico, así que ya no tienes excusa para no ir a mover un rato el esqueleto. O, si lo prefieres, seguro que tienes un parque cerca de tu casa donde poder ir a pasear y respirar aire fresco, disfrutando de la brisa y de ti mismo. Lo importante es que te muevas, y que tu cuerpo lo note. ¡Si siempre has querido apuntarte a clases de salón, esta es tu mejor oportunidad!
La otra área importante que no debes descuidar es la psique, es decir, todo lo que tiene que ver con la actividad mental y cerebral. Y de nuevo, la jubilación te aporta más características positivas. Son muchos los museos, cines y salas de exposiciones que te ofrecen grandes descuentos para que disfrutes de una infinidad de cuadros, películas y exposiciones prácticamente gratis. Si te gustaba el arte, pero te parecía demasiado costoso ahora ya nunca lo será.
También, el retiro de la vida laboral te permitirá poder seguir formándote en temas de educación, y podrás disfrutar de cursos de informática, cocina o idiomas. Todo vale mientras te guste y lo disfrutes. Aquí lo relevante es seguir activo mentalmente.
Y si no quieres arruinarte en el transporte público yendo y viniendo a todas esas actividades que disfrutas como un enano, no te preocupes, porque gracias a la jubilación gozarás de una cuota muy inferior a la que pagabas antes.